Son tiempos difíciles, la pandemia del coronavirus ha
afectado a gran parte del planeta, durante y después que termine, nuestras
emociones nos pueden pasar factura, es por eso la importancia de la salud
mental.
Para empezar las personas que perdieron a un ser querido y
los que están en cuarentena pueden experimentar culpa, depresión, ideas, ataques
de ansiedad, estrés y angustia. Con todo esto se puede llevar a problemas de
sueño o para dormir, cansancio entre otras.
Recordemos que el estrés y la ansiedad son mecanismos
adaptativos, por lo que buscan que estemos alerta ante cualquier peligro y con
todo lo que está pasando es lógico experimentarlo, porque nos sentimos bajo
amenaza constantemente.
El estrés y la ansiedad al estar alerta, nos preparan para
luchar o huir, como se hacía en la antigüedad, como el ser humano debía
alejarse o combatir peligros potenciales como pudiera ser algún animal salvaje,
para esto necesitaremos fuerza, velocidad, agilidad, para poder cumplir está
función inhibe otras como las del sistema reproductor, digestivo, inmunológico
(Es el encargado de las defensas ante enfermedades), procesos de crecimiento,
azúcar en la sangre, presión arterial y otros efectos más. Por lo que solamente
se debería usar en pequeños periodos de tiempo para mantener el equilibrio del
cuerpo, el problema que hoy en día se vuelve crónico y con todo lo que estamos
viviendo lo experimentamos más aún.
Por lo que es frecuente que las personas no duerman bien,
se despierten cansados, que tengan parálisis del sueño, se enfermen
constantemente, que puedan experimentar algún trauma o crisis y una gran
cantidad de problemas. Por lo que es
importante mantener la calma, tener estrategias de afrontamiento para hacerle
frente al estrés, técnicas de relajación, mantenernos activos y si lo
necesitamos solicitar ayuda.
Saludos,
Miguel
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